

¿QUIÉN ES MARTÍN?
- Martín Guerra es un joven empresario oriundo de Joaquín Suárez, Canelones.
Metalúrgico de oficio y director de El Rey del Poliuretano, se caracteriza por su visión emprendedora y su capacidad de transformar desafíos en oportunidades.
En 2024 realizó la compra del mítico avión de Neptunia, una adquisición que en un principio nació como un proyecto impulsivo para convertirlo en un hospedaje personal y una experiencia única. En ese momento, Martín atravesaba una situación crítica en su empresa debido a un accidente que casi la lleva al cierre.
Sin embargo, decidió continuar adelante con esta idea, confiando en su instinto y en el valor de soñar en grande.
El día del traslado del avión, Martín comprendió que su proyecto tenía un potencial mucho mayor al que había imaginado.
La repercusión social fue inmediata: numerosas personas se acercaron para consultarle sobre ser socios o incluso comprar el proyecto. Lo que había comenzado como un sueño personal se transformó rápidamente en un movimiento que despertó el interés y la ilusión de muchos.
Convencido del impacto que podía generar, Martín decidió volcar todo su tiempo, energía y capital para concretar esta experiencia.
Hoy, su meta es ofrecer un hospedaje único en Uruguay, que combine historia, innovación y un profundo vínculo con la gente.
EXPERIENCIA
- La experiencia principal consiste en relacionar la historia del país y del mítico avión con un entorno armonioso de paz y tranquilidad.
Para ello recorrimos casi 50 chacras en 4 departamentos diferentes hasta encontrar el lugar perfecto: un punto estratégico que combina buen acceso logístico, vistas privilegiadas, serenidad y contacto con la naturaleza. Así elegimos la chacra ideal en las Sierras de Minas.
El proyecto tiene como eje central un avión transformado en vivienda premium de más de 30 m². En su interior, los huéspedes encontrarán un dormitorio con baño en suite, un living confortable y una pequeña cocina con frigobar.
Todo diseñado con un estilo moderno y minimalista, pensado para ofrecer comodidad y calidez.
Al descender por la escalera del avión, los visitantes se encontrarán con una barbacoa de construcción moderna, amplia y funcional. Este espacio contará con una gran parrilla al estilo uruguayo, dos dormitorios adicionales y un baño extra, brindando la posibilidad de disfrutar en familia o con amigos sin perder privacidad ni confort.
El corazón de la experiencia es la interacción entre los espacios: mientras el visitante prepara un asado en la barbacoa, podrá contemplar a su familia disfrutando de la piscina climatizada con vistas únicas al atardecer.
Sobre la piscina, elevado a 2,5 metros, descansa el histórico avión, convertido en símbolo y protagonista de la estadía.
La propuesta es privada y exclusiva: el huésped será dueño del avión por dos noches.
Tendrá un avión privado histórico, enclavado en un entorno natural incomparable, con una piscina climatizada y la posibilidad de vivir el auténtico ritual del asado uruguayo frente a las Sierras de Minas.
Más que un hospedaje, esta es una experiencia única en Uruguay.

¿QUIÉN ES MARTÍN?
- Martín Guerra es un joven empresario oriundo de Joaquín Suárez, Canelones.
Metalúrgico de oficio y director de El Rey del Poliuretano, se caracteriza por su visión emprendedora y su capacidad de transformar desafíos en oportunidades.
En 2024 realizó la compra del mítico avión de Neptunia, una adquisición que en un principio nació como un proyecto impulsivo para convertirlo en un hospedaje personal y una experiencia única. En ese momento, Martín atravesaba una situación crítica en su empresa debido a un accidente que casi la lleva al cierre.
Sin embargo, decidió continuar adelante con esta idea, confiando en su instinto y en el valor de soñar en grande.
El día del traslado del avión, Martín comprendió que su proyecto tenía un potencial mucho mayor al que había imaginado.
La repercusión social fue inmediata: numerosas personas se acercaron para consultarle sobre ser socios o incluso comprar el proyecto. Lo que había comenzado como un sueño personal se transformó rápidamente en un movimiento que despertó el interés y la ilusión de muchos.
Convencido del impacto que podía generar, Martín decidió volcar todo su tiempo, energía y capital para concretar esta experiencia.
Hoy, su meta es ofrecer un hospedaje único en Uruguay, que combine historia, innovación y un profundo vínculo con la gente.
EXPERIENCIA
- La experiencia principal consiste en relacionar la historia del país y del mítico avión con un entorno armonioso de paz y tranquilidad.
Para ello recorrimos casi 50 chacras en 4 departamentos diferentes hasta encontrar el lugar perfecto: un punto estratégico que combina buen acceso logístico, vistas privilegiadas, serenidad y contacto con la naturaleza. Así elegimos la chacra ideal en las Sierras de Minas.
El proyecto tiene como eje central un avión transformado en vivienda premium de más de 30 m². En su interior, los huéspedes encontrarán un dormitorio con baño en suite, un living confortable y una pequeña cocina con frigobar.
Todo diseñado con un estilo moderno y minimalista, pensado para ofrecer comodidad y calidez.
Al descender por la escalera del avión, los visitantes se encontrarán con una barbacoa de construcción moderna, amplia y funcional. Este espacio contará con una gran parrilla al estilo uruguayo, dos dormitorios adicionales y un baño extra, brindando la posibilidad de disfrutar en familia o con amigos sin perder privacidad ni confort.
El corazón de la experiencia es la interacción entre los espacios: mientras el visitante prepara un asado en la barbacoa, podrá contemplar a su familia disfrutando de la piscina climatizada con vistas únicas al atardecer.
Sobre la piscina, elevado a 2,5 metros, descansa el histórico avión, convertido en símbolo y protagonista de la estadía.
La propuesta es privada y exclusiva: el huésped será dueño del avión por dos noches.
Tendrá un avión privado histórico, enclavado en un entorno natural incomparable, con una piscina climatizada y la posibilidad de vivir el auténtico ritual del asado uruguayo frente a las Sierras de Minas.
Más que un hospedaje, esta es una experiencia única en Uruguay.